CREMATORIOS PARA MASCOTAS: POR QUÉ DEBEMOS APOSTAR POR ELLOS

La muerte de un animal es uno de los momentos más temidos por sus dueños. Sea de forma natural, por la edad o por enfermedad tarde o temprano llegará el momento de despedirse de nuestra mascota. Se trata de un proceso difícil, complejo y puede llegar a afectar emocional y físicamente a una persona, con potencial para afectar de manera adversa su salud. Incluso este tipo de situaciones en personas mayores y niños pudieran requerir atención psicológica especializada. Pero debemos de estar preparados porque, aunque sea un momento difícil, es un momento para tomar decisiones y para saber responder a cómo queremos actuar.

Es evidente que nuestras mascotas se hacen un miembro más de la familia y por ello, el día que se marchan, queremos darles un final honroso y que nos ofrezca el mejor recuerdo. Son muchos los años que pasan junto a nosotros y mucha la compañía y cariño que hemos recibido de ellos.

Lo primero que tenemos que hacer es notificar la muerte en la mayor brevedad al registro censal de identificación de animales de compañía donde se encuentre inscrito. El tratamiento de los restos es preciso hacerlo a través de los servicios municipales, clínica o de los servicios de una funeraria para mascotas. Así debemos de informarnos de las distintas posibilidades existentes, como es la incineración para nuestro animal para poder guardar así sus cenizas.

La incineración es un servicio que ofrecen la mayoría de los servicios veterinarios municipales, a través de los crematorios de mascotas, que nos permite darles una muerte digna y que sus cenizas puedan ir a un recipiente contenedor especial con el fin que deseemos.

TIPOS DE CREMACIÓN DE MASCOTAS

La cremación de mascotas puede ser individual o colectiva. La incineración individual es más cara porque se realiza solo a tu mascota y permite al dueño llevarse sus cenizas para conservarlas en homenaje a su animal de compañía. La colectiva es más barata, pero se realiza junto a otras mascotas y no hay posibilidad de recuperar las cenizas. Por ello dependerá de los recursos económicos con los que contemos.

Un servicio que incluya la recogida del animal, un velatorio de una hora, la cremación y una urna básica puede llegar a costar 200 euros en el caso de ser un animal con un peso que no supere los 20 kilogramos. Para tamaños mayores, el precio será más elevado.

Algunas compañías también ofrecen lo que se denomina una póliza de seguro funerario para mascotas, donde se asegura un servicio integral por un importe anual, que puede ser renovable cada año, sin sobreprecios sobre el servicio, y con descuentos a algunos elementos adicionales como urnas de diseño o alguna sesión fotográfica previa al deceso del animal.

En los crematorios de mascotas suelen pedir al veterinario que confirme la muerte y voluntad de los dueños de incinerar a la mascota por seguridad y para evitar problemas.

Los restos de ceniza producidos están completamente libres de gérmenes o bacterias, por lo tanto pueden ser mantenidos en casa dentro de una urna apropiada o pueden ser esparcidos en el mar, en la tierra o enterrados en un cementerio.

VENTAJAS DE LA INCINERACIÓN

• Higiénica: Porque evita problemas sanitarios. Con la incineración se evitan posibles focos de infección, principalmente cuando la muerte se ha producido por enfermedades infecto-contagiosas.

• Ecológica: Ya existen tecnologías en los crematorios para cumplir con los requisitos referidos a emanaciones de humo y olores. Por lo que no afectan al medio ambiente. Además, al enterrar a una mascota pueden producirse ciertos contaminantes ambientales, se pueden contaminar afluentes subterráneos de agua, con mercurio, arsénico y formaldehído, lo que no se produce cuando se incinera un cuerpo.

• Práctica: Debido a la sencillez y rapidez del proceso, mucho más simple que un entierro tradicional.

• Moderna: La incineración es considerada como un servicio funerario moderno. Por un lado, porque se utilizan avanzadas tecnologías en los hornos, que se intentan mejorar constantemente. Y porque, además, si consideramos el crecimiento exponencial de la población mundial y la falta de espacios, la cremación aparece como la solución más apropiada.
  

Fuente: CLINICAANIMAL